Tuve que ir hasta Baños en Ecuador para encontrarme con el mejor columpio del mundo. Desde que lo vi por primera vez en una imagen en Internet quise montarme en él y si hacía falta viajar muchos kilómetros para hacerlo, esa no iba a ser una excusa.
A unas cuatro horas al Sur de Quito en autobús nos encontramos con Baños de Agua Santa, una pequeña localidad muy turística y famosa porque en ella se pueden hacer muchos deportes de riesgo como el canopy (en otros lugares conocido como tirolina o tirolesa) y por su increíble cascada “El pailón del diablo”.
Pero yo no fui hasta allí para hacer conopy, sino para montarme en el columpio de la Casa del Árbol. Para llegar hasta allí hay que coger un autobús en Baños, que en 45 minutos te lleva a la montaña en la que está situada y que tiene una vista inmejorable del Volcán Tungurahua.
Para entrar tenemos que pagar un dólar, y recomiendo ir en temporada baja, porque si no las colas serán muy largas y tu viaje en columpio más corto.
La sensación que tienes al volar al borde del abismo de 2.600 metros es tan difícil de describir que prefiero que veáis lo bonito que es, y sintáis la experiencia a través de mis ojos ya que grabé lo que veía mientras me columpiaba con mis gafas de sol (spectacles de Snapchat). (Lo siento por el grito).
Y si ahí habéis visto la experiencia en primera persona ahora toca verla desde otro punto de vista en el siguiente vídeo.
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