Los 4 lugares más raros en los que me he alojado

En el tiempo que llevo viajando lo he hecho de tantas maneras distintas que eso ha hecho que me haya salido en muchos casos de los hoteles habituales para probar otros lugares en los que pasar la noche más originales y, en la mayoría de los casos, más baratos.

Un hotel capsula

Al pensar en hoteles capsula todos pensamos en Japón, pero por desgracia el que yo he probado no está en el lejano Oriente sino un poquito más cerca, en Gdansk, una ciudad al norte de Polonia.

Aunque pensé que iba a ser un poco claustrofóbico, la experiencia fue buena y por 10 euros me parece un precio justo para pasar una noche. ¡Como soy pequeñita me sobraba espacio!

Un barco

En airbnb hay de todo, incluso barcos. En Oporto me alojé en un barco amarrado en su puerto. Un lugar privilegiado en el que pasar unas cuantas noches mirando el cielo estrellado desde la claraboya de encima de la cama y en el que descansar como nunca sintiendo el vaivén de las olas.

La casa de un cura

¿Quién ha dicho que los curas no pueden alquilar sus casas en airbnb? Eso fue lo que debió de pensar el cura de Getxo antes de poner su anuncio. Fui la primera de sus inquilinas y su servicio no podía ser mejor: una habitación para seis solo para mi por poco más de 20 euros, la playa cerca y sitio para aparcar frente a la iglesia. Cuando el GPS me dijo que había llegado me pareció un poco surrealista, pero es uno de los mejores airbnb en los que me he alojado.

Una hamaca

Este es claramente mi favorito. En La Guajira (Colombia) el mejor alojamiento que puedes encontrar son las hamacas. Por 8.000 pesos colombianos, poco más de dos euros, pesos puedes pasar la noche en ellas, y aunque a primera vista se pueda pensar que no son cómodas es una impresión totalmente equivocada. ¡Son muy cómodas! Eso sí, aún son más cómodos los chinchorros, que son hamacas más grandes y con mantita incorporada, son más caros, pero merecen la pena.

Dormir en Cabo de la Vela en una hamaca frente al mar y despertarte viendo el amanecer en la playa es definitivamente una de las mejores experiencias de mi vida.